De un total aproximado de 1200 estudiantes activos, actualmente son más de 300 los que reciben ayuda económica para cursar alguna de las 6 carreras que dicta el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM)

Tras el reciente otorgamiento de más de 120 becas Manuel Belgrano, la secretaria Académica del Instituto Georgina Etchegaray,  comentó acerca de las distintas ayudas económicas y dijo: “Sabemos que estamos en una época compleja. Hay estudiantes que viajan o tuvieron que mudarse a donde está emplazada su sede y toda esta contención económica contribuye para que puedan continuar sus estudios”.

A su vez contó que las becas están distribuidas en becas CIN de investigación, ayudantías de alumnos y prácticas profesionalizantes rentadas, becas Progresar, becas Manuel Belgrano y las becas propias de la UNVM como lo son los gastos del comedor, residencias o fotocopias, entre otros.

Etchegaray comentó que en muchas ocasiones y en función del tipo de beca, los estudiantes lo toman como un primer trabajo.  “Es un concepto interesante porque favorece a los chicos para que no tengan que salir a buscar un trabajo externo y estos ingresos económicos de alguna manera los ayudan con sus gastos mínimos de movilidad o de material de estudio. Quedan dentro del sistema académico y pueden mantener la regularidad en sus estudios sin necesidad de dilatar los mismos. Al tener el ingreso, el estudiante tiene ese apoyo y puede terminar en tiempo y forma la carrera sin necesidad de extenderla más años”, indicó.

La decana, Carolina Morgante, también habló de la importancia que tienen estas becas. “En muchas oportunidades, además de representar una ayuda económica, el estudiantado puede estar en contacto permanente con el sector social y productivo de la ciudad y la región. Eso también permite que logren adquirir experiencia en su área de estudio y luego puedan salir preparados, con una fuerte formación práctica, al campo laboral”. «También en Básicas tenemos las ayudantías de alumno rentadas que le dan la posibilidad a los estudiantes de dar sus primeros pasos en la docencia, percibiendo un ingreso por esa actividad», resaltó la máxima autoridad del Instituto

Y agregó que además de todos estos beneficios, estas ayudas económicas representan también un “fuerte acompañamiento y contención” para el estudiante en una de las etapas más importantes de su vida. “Con estas experiencias  se generan vínculos estrechos con toda la comunidad y la vida universitaria y eso nos transforma en una gran familia”.