La Universidad Nacional de Villa María recibirá financiamiento para fortalecer investigaciones orientadas a la conservación de la biodiversidad y a la bioeconomía. Se trata de dos iniciativas que integran docentes y becarias del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas y que se destacaron por su vinculación con el sector.

En el marco del Programa Integral de Financiamiento a la Investigación en Córdoba (PIFIC) el Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la Provincia seleccionó dos propuestas presentadas desde el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM).

Por un lado, está el trabajo que integran docentes y becarios del área de Alimentos, quienes buscan desarrollar lácteos que, además de satisfacer las necesidades nutricionales básicas, puedan proporcionar beneficios para la salud humana.

En concreto esta propuesta, enmarcada en el eje de bioeconomía, apunta a producir queso tipo mozzarella con esa particularidad y para ello la provincia destinará 5 millones de pesos.

Por otra parte, dentro del eje destinado a la conservación de la biodiversidad, fue seleccionado el trabajo que integran desde Ambiente y Agronomía, el cual pretende implementar microorganismos eficientes para la biorremediación de suelos que estén contaminados con atrazina.

El objetivo es recuperar los espacios afectados y también evitar la propagación de este herbicida a través de otros recursos como el agua subterránea. En este caso el ministerio aportará la suma de 2 millones y medio de pesos.

«En el crítico contexto que vive el sistema científico nacional este aporte sin dudas es un aliciente para poder seguir sosteniendo los avances en los que se viene trabajando desde hace años y que apuntan a mejorar la calidad de vida de la sociedad en general», señala la secretaria de Investigación y Extensión de Básicas, Mariana Montenegro y añade: «Pese al panorama, celebramos este logro porque son procesos evaluativos muy exhaustivos y el hecho de haber sido seleccionados da cuenta de la pertinencia y la calidad científica de los abordajes».

Resulta importante mencionar que ambas líneas de investigación llevan adelante sus trabajos en las instalaciones del Instituto Multidisciplinario de Investigación y Transferencia Agroalimentaria y Biotecnológica (IMITAB), siendo este el organismo de doble dependencia entre Conicet y la UNVM.

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Este jueves 31 de octubre el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas inauguró formalmente un espacio del Campus utilizado para el procesamiento de alimentos. A partir de esto, las instalaciones quedarán identificadas con el nombre de Carlos Berra, en honor a quien fuera docente y funcionario de la Universidad.

Desde hace algunos meses el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) puso en funcionamiento dentro del Campus un espacio destinado al procesamiento de alimentos.

Se trata de la primera Planta Industrial de este tipo, la cual es aprovechada por proyectos vinculados a la Ingeniería en Alimentos y la Tecnicatura Universitaria en Bromatología, en cooperación también con Medicina Veterinaria y Agronomía.

En ese sentido, este jueves 31 de octubre por la mañana se llevó a cabo el corte de cinta que indica el protocolo y, con el apoyo unánime del Consejo Superior, se designó a la planta bajo el nombre de ‘Ingeniero Carlos Berra’, en honor a quien fuera docente y funcionario del Instituto Académico en cuestión.

El emotivo acto fue presidido por el rector, Luis Negretti, la decana Carolina Morgante y el coordinador de Gabinete, Germán Cassetta. También acompañaron las secretarias del Instituto, Georgina Etchegaray y Mariana Montenegro, el decano de Sociales junto a sus secretarias, secretarios del rectorado, coordinadores de carrera, docentes y nodocentes.

En representación de la familia Berra estuvieron las hijas de Carlos, Lucía y Rocío, junto a su mujer Silvia, sus nietas y su primo.

A su vez, acompañaron la ceremonia autoridades de la Universidad Nacional de Córdoba y Río Cuarto y del Instituto Multidisciplinario de Investigación y. Transferencia Agroalimentaria y Biotecnológica (IMITAB) Conicet – UNVM.

“En lo personal, recuerdo a Carlos como un funcionario incansable, con un entusiasmo y una alegría permanente que dedicó su vida a engrandecer a nuestro Instituto y a promover la transferencia del conocimiento a la comunidad en general”, destacó Morgante y reforzó: “Gracias a su visión, compromiso y perseverancia hoy contamos con esta planta en funcionamiento que permite materializar los sueños y proyectos de nuestra institución”.

Por su parte el rector resaltó: “Carlos fue un gran mentor de la vinculación entre el sector público y privado y por eso sé que la iniciativa de designar este espacio con su nombre es el mayor homenaje que le podemos hacer a una persona como él. Lo celebramos con profunda alegría y orgullo”.

Procesamiento de leche de burra:

Resulta pertinente destacar que actualmente la Planta Industrial destina la totalidad de su capacidad productiva al procesamiento de leche de burra, la cual es extraída del tambo que la UNVM tiene en la Estancia Yucat.

Esta actividad se enmarca en un proyecto de investigación que la Universidad de Villa María, a través del IMITAB, lleva adelante de manera conjunta con la UNRC y que apunta a introducir al mercado un producto apto para niños y niñas con alergia a la proteína de la leche de vaca.

Es por esto que, al finalizar el acto formal, parte del equipo de trabajo de ese proyecto brindó detalles respecto al mismo y finalizó con una degustación del producto en cuestión.

Dentro de su extensa trayectoria, la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) trabaja en diversas propuestas de investigación que buscan dar respuesta a las necesidades y problemáticas de la comunidad.

En ese sentido, la docente del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas y especialista en toxicología, doctora Lara Buthet lidera un equipo de trabajo centrado en salud socioambiental que actualmente avanza en el análisis de la calidad del aire en las inmediaciones de un jardín de infantes del barrio Botta, el cual está ubicado a metros de un micro basural.

Según comenta Buthet, este grupo viene realizando estudios sobre las características del suelo del lugar y recientemente colocaron un medidor de material particulado adquirido desde un proyecto de Conicet, que les permitirá recopilar datos en tiempo real, para luego analizarlos y así determinar la calidad de ese aire.

Respecto al dispositivo destacaron el nivel de precisión en los datos arrojados, el cual consideraron «clave» para el desarrollo de acciones a futuro. «El aparato nos permite medir la temperatura, humedad, dióxido de carbono y principalmente el tamaño de las partículas presentes en el aire. Este último factor es de importancia debido a que, mientras más pequeñas sean las partículas, mayor probabilidad existe de que estas queden alojadas en los pulmones», resaltó la doctora.

«Esto es fundamental debido a que, si se logra identificar su composición, se puede inferir que el basural próximo al jardín de infantes podría ser un causante de la dispersión de componentes posiblemente tóxicos, generando de esta forma, un probable daño para la salud», remarcó Buthet.

Es importante mencionar que en función a los resultados que se obtengan se podrá trabajar en una propuesta para mejorar las condiciones del sitio, contemplando la implementación de políticas públicas que permitan también dar trabajo formal a aquellas personas que viven del tratamiento y reutilización de los diversos desechos que allí se encuentran, como el cobre y los plásticos.

Por último, resulta relevante destacar que el grupo que dirige la docente de la UNVM acciona en diversos sentidos, llevando a cabo otras actividades de concientización ambiental con las y los vecinos, en conjunto con el municipio local a través del Instituto Libre del Ambiente (ILA) y el Municerca número tres.

Tal es así que el 2 de noviembre se realizará un ‘Bingo Ambiental’, el cual esperan que funcione como «espacio de vinculación y acercamiento» con la comunidad entre sí y al mismo tiempo con las instituciones involucradas, priorizando las trayectorias de vida de quienes transitan esos lugares

El Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) inaugurará formalmente una planta industrial para el procesamiento de alimentos. Si bien el espacio ya está en funcionamiento desde hace un tiempo en el Campus, durante el evento se realizará el corte de cinta que indica el protocolo y se descubrirá la placa homenaje que denomina al lugar. 

En la última sesión del Consejo Superior de la UNVM se aprobó de manera unánime la propuesta para identificar como ‘Ingeniero Carlos Berra’ a la Planta Industrial que funciona en la órbita del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas. La iniciativa fue presentada por la decana Carolina Morgante en el marco de la inauguración del espacio y pretende homenajear los años de servicio de quien fuera su secretario de Investigación y Extensión y de Vinculación desde 2019 hasta inicios de 2024.

En este sentido, el corte de cinta y descubrimiento de la placa en homenaje se realizará el próximo jueves 31 de octubre a las 10 horas en el ingreso a la planta, la cual está ubicada en las inmediaciones del sector de deportes del Campus universitario.

Según detallaron durante la sesión, el espacio actualmente ya está en funcionamiento y casi el total de su producción se aboca al desarrollo de la leche de burra como alternativa de consumo en niñas y niños con alergia a la proteína de la leche de vaca. Próximamente esperan poder expandirse incorporando nuevas líneas de procesamiento, principalmente relacionadas con el área de los alimentos.

«La idea es que este espacio se constituya como un engranaje clave de nuestra Ingeniería en Alimentos y de la Tecnicatura en Bromatología, también en vinculación con Medicina Veterinaria y otras carreras de Básicas. Los futuros profesionales de estas disciplinas requieren de un contacto directo con todo lo vinculado a procesos productivos y esta planta busca suplir esa necesidad» detalló sobre el proyecto la decana Morgante y agregó: «Gracias a un trabajo conjunto con la Universidad Nacional de Río Cuarto, hace algunos meses incorporamos los primeros equipamientos en el marco del proyecto de desarrollo de leche de burra y hoy ya tenemos bastante aceitado el esquema, por eso queremos inaugurar formalmente este espacio que se complementa con el tambo que tenemos en Yucat».

Al momento de ser consultada por la denominación de la planta, la máxima autoridad de Básicas comentó: «Esta propuesta la hicimos luego de conversarlo con el equipo que lleva adelante el espacio y entendemos que es más que meritorio. Carlitos, además de su dedicada labor de muchos años, a este proyecto en particular le puso el cuerpo y todo su conocimiento para hacerlo posible para engrandecer a la profesión que tanto quería. Por eso creemos que, más allá de lo protocolar, será un momento muy emotivo».

Es importante mencionar que Berra, además, fue docente de la Ingeniería en Alimentos, la Tecnicatura Universitaria en Bromatología y su formación de posgrado como magister lo llevó a impartir clases también en algunos módulos del Máster Internacional en Tecnología de los Alimentos (MITA).

En lo que respecta a su trayectoria fuera de la UNVM, se desempeñó profesionalmente en diversos espacios vinculados a la industria láctea, llegando a ser nombrado Director Nacional de Lechería. También encabezó equipos en otros países e integró misiones de asistencia técnica en la temática láctea en China, Angola, Brasil, Colombia, Cuba, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Perú, República Dominicana, entre otros.

 

 

Desde hace años la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) avanza en distintos aspectos que buscan dar respuesta a las necesidades del entorno y preservar el cuidado del medio ambiente. En ese marco, la doctora María José Galván integra un equipo de trabajo interdisciplinario que propone la generación de biogás a partir del aprovechamiento de residuos de la agroindustria.

Según define la investigadora del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM, el biogás es un combustible generado por reacciones de biodegradación de la materia orgánica, para lo cual se emplean ciertos microorganismos y posibilitan determinadas condiciones de temperatura. En ese sentido, el grupo de Galván viene avanzando desde el año 2015  en una línea de investigación que consiste en reaprovechar el desperdicio de la industria agropecuaria para tal fin.

Concretamente al ser Villa María un polo agroindustrial, los altos volúmenes de generación de estos residuos convierten a la ciudad en un escenario propicio para el desarrollo de este tipo de iniciativas en donde los desperdicios son utilizados como materia prima para generar un subproducto.

“Estos residuos son para nosotros el sustrato que nos permite obtener el biogás y, a su vez, extraer el digestato, que también puede ser incorporado como un tipo de biofertilizante”, comenta Galván en el marco de una entrevista que brindó en el programa ‘Diálogos en la Uni’ y agrega: «Estamos en una zona que es muy rica en cuanto a reserva de residuos agroindustriales. Nosotros principalmente trabajamos con estiércol, purines, residuos de cosecha y de los frigoríficos, que son efluentes bastante complicados en cuanto a su tratamiento».

En relación a los principales beneficios de este tipo de energía alternativa, la implementación del biogás permite sustituir en cierta medida el uso de gas convencional como combustible, bajando así las emisiones de gases efecto invernadero, entre otras ventajas ambientales. Además, durante su generación, existe un beneficio ambiental extra en tanto se evita la acumulación de residuos por parte de este sector en particular.

En lo que respecta al trazado de políticas públicas que contribuyen a este tipo de desarrollos, la doctora en ciencias de la ingeniería resalta la importancia de promover líneas crediticias que incentiven a productores a introducir mejoras en los establecimiento y continuar vinculando «estrechamente» a la academia con el sector industrial. «Nosotros también tenemos que hacernos partícipes de estos avances. Por ejemplo, hace un par de semanas recibí una invitación para formar parte del clúster BioE, el cual precisamente busca reunir a todas las partes del proceso para mejorar el incentivo de políticas”.

Doble reaprovechamiento:
Según comenta la docente de la Licenciatura en Ambiente y Energías Renovables, dentro de este mismo desarrollo su equipo también lleva a cabo una iniciativa que pretende «adelantarse a un problema». «Estamos tratando de ir varios pasos adelante para que cuando esta industria del Biogás crezca haya también una buena gestión del digestato que se genera a partir de la producción del biocombustible», relató y especificó: «El digestato puede ser utilizado, entre otras cosas, como fertilizante ya que permite retener la humedad y liberar progresivamente nutrientes para las plantas, trayendo además diversos beneficios para el suelo».

En este aspecto, la investigadora resaltó la articulación con otros proyectos de la UNVM, mencionando que trabajan junto con ellos en la prueba de las mejores mezclas de fertilizantes, analizando promotores de crecimiento y rindes de la planta en cultivos como el tomate. A su vez, también se lleva a cabo un trabajo conjunto con la Universidad Nacional de Córdoba, la de Río Cuarto, Tucumán y el Litoral.

Por último destacó la impronta de vinculación con el sector público y privado que tiene este desarrollo en donde desde la Universidad han conseguido trazar alianzas con municipios, cooperativas y plantas como Yanquetruz, 3C y Enreco. «Luego de trabajos conjuntos, varias de estas empresas han incorporado a estudiantes de la UNVM que se formaron en este proyecto de investigación», mencionó Galván y remarcó: “Es un orgullo muy grande”.

Una comitiva del Gobierno Provincial visitó parte de las instalaciones que la Universidad Nacional de Villa María tiene destinadas a la producción de leche de burra. El recorrido se realizó por la Estancia Yucat y estuvo encabezado por la vicegobernadora, Myrian Prunotto.

En el marco de un proyecto colaborativo entre el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM y la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC), desde hace poco más de dos años ambas instituciones avanzan en un abordaje científico que tiene como fin introducir al mercado alimenticio la leche de burra. El principal objetivo consiste en poder brindar una alternativa de consumo para niños y niñas con alergia a la proteína de la leche de vaca.

En este sentido, este viernes 9 de agosto la vicegobernadora de la Provincia de Córdoba, Myrian Prunotto fue recibida en las instalaciones del Centro de Ordeñe que la UNVM y la UNRC tienen emplazado en las inmediaciones de la Estancia Yucat para interiorizarse acerca de esta propuesta y sumar acciones que permitan la incorporación de este alimento a las góndolas.

La comitiva provincial fue recibida por el rector, Luis Negretti, el coordinador de Gabinete, Germán Cassetta, la decana de Básicas, Carolina Morgante y la secretaria de Investigación y Extensión del Instituto, Mariana Montenegro, quienes participaron de un recorrido por las instalaciones y degustación del producto guiados por el integrantes del equipo interdisciplinario que lleva adelante la propuesta y que está conformado por docentes, investigadores y becarios Conicet.

Es importante destacar que este espacio es donde se llevan a cabo las tareas de cría, cuidado y extracción de la leche, que luego es procesada aún a pequeña escala en la planta piloto del Campus de la UNVM

En el marco de un proyecto de extensión universitaria, investigadores del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM llevaron a cabo una serie de capacitaciones sobre el correcto uso y mantenimiento de equipamiento de laboratorio. La iniciativa tuvo como destinatarios al equipo docente de la Escuela ProA con orientación en Biotecnología.

A través de una nueva iniciativa de vinculación entre la Universidad Nacional de Villa María y la comunidad, un equipo conformado por docentes investigadores del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas encabezó una propuesta de capacitaciones en torno al manejo de dispositivos de última tecnología.

En esta oportunidad, el proyecto avalado por el Instituto de Extensión de la UNVM, estuvo destinado a docentes de la Escuela ProA con orientación en Biotecnología, quienes cuentan con un laboratorio equipado para el tipo de formación que reciben allí los estudiantes de nivel medio. Según comentaron, la propuesta titulada «Del aula al laboratorio» buscaba responder a una necesidad planteada por quienes integran la comunidad educativa y que tenía que ver con poder incorporar habilidades y conocimientos que permitieran la utilización del laboratorio como un recurso y espacio pedagógico.

“El acompañamiento de personas que conocen de la temática y que, además tienen experiencia, es fundamental para transmitir esos conocimientos y que nosotros podamos seguir replicándolos a los estudiantes. No solamente desde la teoría, sino desde la práctica y la vivencia”, comentó el docente de la Escuela ProA, Facundo Mainardi y añadió: “El laboratorio en la formación especializada es importantísimo, ya que aproxima a los chicos a los materiales del laboratorio, al trabajo en ciencia y otras características del trabajo en ciencias naturales”.

De parte de los directores del proyecto, Carla Aminahuel destacó que los talleres se enfocaron en algunos equipos en particular, que contaban con un cuidado y uso específico. Entre ellos, mencionó el uso de aparatología como el autoclave, biorreactores y espectrofotómetros.

Por su parte, Ladislao Vergara destacó la gran predisposición de los docentes en las capacitaciones, y agregó: “Todos los docentes de la escuela ProA están siempre con muchas ganas de poder aprender y explotar al máximo todas las herramientas, y de nuestra parte es importante impulsar esas mejoras para los estudiantes”.

Es importante mencionar que las escuelas de tipo ‘ProA’ son parte de una propuesta pedagógica de la Provincia de Córdoba y por lo general cuentan con espacios de laboratorios de ciencias y talleres dedicados a la actividad experimental. El objetivo es permitir a los y las estudiantes cuestionar sus saberes y confrontarlos con la realidad.

 

 

Se trata de la biotecnóloga Florencia de Lillo quien cursa regularmente el doctorado en Ciencias con mención en Agroalimentos del Instituto de Básicas de la UNVM y actualmente se encuentra realizando un intercambio en San Sebastián, España. 

El Doctorado en Ciencias con mención Agroalimentos es una propuesta de formación de posgrado que el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) incorporó en 2018 con el objetivo de ofrecer a la comunidad una alternativa de profundización acorde a las demandas de la realidad local y regional.

Desde entonces ya han transitado por ese espacio distintos perfiles profesionales que buscan en esta carrera la posibilidad de especializarse dentro de sus respectivos campos de aplicación.

Durante este tiempo, desde el Área de Posgrado del Instituto, se han promovido vínculos con distintos sectores del ámbito nacional e internacional en pos de garantizar una formación integral para sus estudiantes. Tal es así, que desde inicios de 2024 la biotecnóloga Florencia de Lillo se encuentra transitando una estancia de investigación en el ‘POLYMAT-Basque Center For Macromolecular Design And Engineering’, ubicado en San Sebastián, España.

Allí, Florencia, está realizando estudios sobre el desarrollo de nuevas terapias no antibióticas basadas en polímeros responsivos para el control de la mastitis bovina, permitiéndole adquirir entrenamiento en diversas metodologías para la síntesis, caracterización química y evaluación de nanopartículas que puedan ser aplicadas en medicina veterinaria para la prevención y tratamiento de infecciones intramamarias en vacas lecheras.

«Es una experiencia única ya que te permite adquirir conocimientos y herramientas nuevas, lo cual es muy valioso porque te ayuda a encarar tu proyecto desde otro punto de vista también. Además, esta oportunidad es importante no solo a nivel individual sino para todo el grupo de trabajo de Villa María, a quienes espero poder transmitir lo que estoy aprendiendo acá», destacó la doctoranda y añadió: «Estoy muy agradecida tanto con el grupo de España por el recibimiento y predisposición como con mi equipo del IMITAB por confiar en mí y posibilitar este vínculo».

Es importante mencionar que la estudiante financia sus estudios de doctorado con una beca otorgada por el Conicet, con lugar de trabajo en el Instituto Multidisciplinario de Investigación y Transferencia Agroalimentaria y Biotecnológica (IMITAB) de la UNVM.

Allí su abordaje sobre ‘Recursos de la microbiota comensal de la glándula mamara como estrategia terapéutica en bovinos lecheros infectados con Staphylococcus aureus’ es dirigido y codirigido por las doctoras Carina Porporatto y Paula Isaac, respectivamente. A su vez, según destacaron, su actual estancia de investigación en España está siendo subvencionada por el propio Instituto de San Sebastián.

 

A partir de una acción conjunta entre el Instituto Multidisciplinario de Investigación y Transferencia Agroalimentaria y Biotecnológica (IMITAB) y AERCA, se concretó la primera ‘Jornada Vincular’. El objetivo fue presentar a empresas avances de las distintas líneas de trabajo que se llevan a cabo en la UNVM. 

Este jueves 11 de abril concretaron la primera ‘Jornada Vincular’ organizada entre el Instituto de Investigación de la Universidad Nacional de Villa María,  Conicet Córdoba, y la Asociación de Empresarios Región Centro Argentino (AERCA). La iniciativa busca poner en la agenda del sector productivo los distintos avances que se llevan a cabo en la UNVM y que pueden ser aprovechadas para desarrollos de impacto regional.

Concretamente, desde el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM, el espacio fue aprovechado por investigadores, becarias y becarios que tienen lugar de desarrollo científico dentro del IMITAB y que llevan a cabo avances vinculados a distintas líneas temáticas relacionadas fundamentalmente al desarrollo agroalimentario, sustentabilidad ambiental y ciencias veterinarias, entre otras.

Es importante mencionar que previo a esta instancia, investigadores y becarios participaron de encuentros de preparación en torno a metodologías expositivas a fines de garantizar una vinculación provechosa.

En la última convocatoria a becas doctorales impulsada por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) tres profesionales que quedaron en el orden de mérito escogieron al Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María como lugar de trabajo. Sus abordajes apuntan a generar aportes en las ciencias veterinarias y de los alimentos.

A partir de agosto de 2024 el Instituto Multidisciplinario de Investigación y Transferencia Agroalimentaria y Biotecnológica (IMITAB) sumará tres nuevos becarios que se incorporarán en distintas líneas de investigación vinculadas a las ciencias veterinarias y de los alimentos.

Se trata de Abraham Sesin, Paula Mónaco y Fernando Laconi quienes eligieron al mencionado organismo de doble dependencia entre la UNVM y Conicet para continuar sus estudios de posgrado enmarcados en una beca de trabajo doctoral.

Año a año el Conicet impulsa una nueva convocatoria a becas para quienes se ven interesados en continuar sus estudios de posgrado inmersos en la investigación. El objetivo de este programa es que durante los 5 años que dure su formación las y los profesionales de las distintas disciplinas puedan dedicarse totalmente a ello, haciendo aportes significativos a la ciencia mientras en simultáneo van cursando el doctorado que elijan.

De este modo, el mencionado organismo nacional, permite fortalecer las líneas de trabajo en las Universidades, sumando recurso humano calificado en este sentido.

«Como siempre destacamos, las admisiones para financiamientos de estudios de doctorado por Conicet es un reconocimiento importante para nuestra institución, dado que pasan por una gran cantidad de evaluaciones vinculadas principalmente al análisis de antecedentes en investigación, docencia y extensión. No sólo se evalúa eso en los postulantes, sino que también se analiza el perfil de quienes se presentan como directores de la beca, al igual que el plan propuesto y el lugar donde trabajarán.», remarcó la directora del IMITAB Carina Porporatto y sumó: «Por todo esto es que decimos que es una noticia para celebrar, porque reconoce trayectorias individuales y de los equipos de investigación».

Por su parte, la decana Carolina Morgante, comentó: «Estos resultados representan una renovación de expectativas para el ciclo lectivo que comienza porque significa la oportunidad de sumar nuevos profesionales a líneas de trabajo que vienen avanzando de forma comprometida con distintas temáticas vinculadas a la investigación básica y aplicada, las cuales repercuten de manera positiva en la sociedad».

Temas de trabajo:

  • Abraham Sesin: «Evaluación de la potencialidad probiótica y características postbióticas de microorganismos aislados de lactosuero libres y microencapsulados para el desarrollo de ingredientes funcionales». Dirigido por Yanina Rossi y Mariana Montenegro
  • Paula Mónaco: «Eficacia de la inmunoterapia con nanopartículas de Quitosano en el entrenamiento de la inmunidad innata de bovinos». Dirigida por Carina Porporatto y Falcone
  • Fernando Laconi: «Estudio de hidrogeles formulados con polímeros antimicrobianos naturales para el tratamiento de infecciones intramamarias en bovinos». Dirigido por Laura Breser y Carina Porporatto

Es importante mencionar que en el caso de Cabrera y Laconi son graduados del propio Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM. A su vez, las graduadas de la Licenciatura en Ambiente y Energías Renovables, Mónica Pedernera y Rocío Magalí Torres también fueron seleccionadas por Conicet pero con lugar de trabajo en el Cconfines-Sociales y en el CIT-Humanas, respectivamente