El documento definitivo fue aprobado por el Consejo Superior de la UNVM.

Tras ser aprobado por el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM), se pone a disposición de la comunidad universitaria el Calendario Académico para el año lectivo 2021.

Cabe destacar que este documento establece las recomendaciones mínimas para coordinar la actividad de enseñanza y aprendizaje de las distintas dependencias académico – administrativas, con el objetivo de asegurar un adecuado funcionamiento en el dictado de cursos y carreras.

Consulte el documento aquí>> Calendario Académico UNVM 2021

La Ingeniería en Alimentos es una propuesta de grado del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) que se dicta de manera conjunta con la Escuela Superior Integral de Lechería (ESIL) y que cumple con los estándares requeridos por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau). «Se trata de una novedosa alternativa de formación articula su dictado entre dos instituciones de la ciudad, facilitando su vinculación con el sector», indicó el coordinador Juan Pablo Bertello y añadió: «Nuestra carrera se destaca de otras propuestas por la gran cantidad de actividades prácticas que posee».

Actualmente el plan de la ingeniería prevé 5 años de estudios que suman más de 4mil horas divididas en 51 espacios curriculares. A su vez contempla una titulación intermedia como Técnico Superior en Lechería y Tecnologías de los Alimentos, que se alcanza una vez finalizados los primeros 3 años de formación. «La idea es proporcionar a nuestros estudiantes una rápida salida laboral, que además por el perfil, es altamente demandada en la industria del sector alimenticio»,  destacó Pablo y resaltó: «La carrera tiene prácticas profesionalizantes desde el primer año, eso posiciona a nuestros graduados y graduadas en el mundo laboral ya que desde el primer momento reciben una formación que está totalmente vinculada con lo que sucede en el ámbito de aplicación profesional».

Tipo de formación:

Las ingenierías en alimentos poseen siempre tipos de formación vinculados a la región en la que están insertas. «Por ejemplo, la carrera que se dicta en la Mesopotamia, en la Universidad de Entre Ríos (UNER), tiene una fuerte impronta sobre producción de frutas y jugos. La de Mendoza (UNCUyo) se vincula estrechamente al procesamiento de frutas, verduras y conservas», señaló Bertello y agregó: «La de Villa María, en particular, al estar situada en una de las cuencas lecheras más fuertes e importantes del país, se potencia con el perfil de profesionales formados con ciertas fortalezas, ventajas y capacidades en el área de los productos lácteos».

En relación al título que otorga la UNVM, Bertello comentó que el mismo habilita a los futuros profesionales para trabajar en el ámbito público en el control de plantas procesadoras de alimentos para desarrollar reglamentación y llevar adelante la aplicación del Código Alimentario Argentino. En lo que respecta al sector privado, puede abocarse a la gestión de calidad y, en cierta medida, están preparados para intervenir en el diseño de equipos que están involucrados en procesamiento de alimentos. A su vez, el perfil profesional también contempla la posibilidad de dedicarse a la docencia con una fuerte impronta sobre la investigación científica.

Pandemia y universidad:

Con respecto al contexto de virtualidad excepcional, derivado de la emergencia sanitaria por el Covid-19, el coordinador académico destacó el compromiso de estudiantes y docentes en la adecuación de los contenidos de los distintos espacios curriculares. «A esta altura del año vemos que el balance es muy positivo. Al comienzo pensamos que sería imposible pero nos encontramos con la voluntad y decisión de los equipos docentes de acompañar la continuidad del calendario académico pese a las circunstancias», dijo Bertello.

«Con ciertas materias tuvimos que pensar estrategias completamente nuevas ya que por su importante carga práctica era imposible evaluar resultados. En esos casos nos enfocamos en los procesos de aprendizaje y esto fue posible también, gracias a la predisposición de los estudiantes que permanentemente siguieron las actividades propuestas», resaltó el coordinador y finalizó: «Esperamos en 2021 poder concretar ciertas instancias presenciales, necesarias para cerrar el cursado de algunos espacios curriculares».

Perfil del entrevistado:

Juan Pablo Bertello es villamariense y estudió Ingeniería Química en la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Villa María (UTN-FRVM). Realizó una especialización en Enología en la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) y actualmente se encuentra estudiando la Maestría en Viticultura y Enología. A finales de noviembre de 2019 fue reelecto por el voto directo de sus pares para desempeñarse como Coordinador de la carrera por tercer período consecutivo.

 

Así se refirió el coordinador de la carrera, Pablo Ambrosino, en relación a quienes eligen esta propuesta de formación que fue impulsada en el año 2014 por el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) y que se dicta en el Centro Regional de Educación Superior (CRES) de San Francisco. Actualmente la carrera ya cuenta con sus primeros graduados y graduadas y se posiciona como una alternativa novedosa en la región.

«El sello distintivo que tiene la carrera de Diseño Industrial está en que nuestros estudiantes se forman en constante relación con las necesidades del contexto, tenemos docentes que traduce esas necesidades en consignas y con esas consignas los equipos de trabajo buscan soluciones a los problemas reales que surgen en la sociedad», comentó el coordinador y agregó: «la ubicación geográfica en el centro del país también nos posibilita un diálogo fluido con el sector productivo industrial a nivel regional, que está siempre predispuesto a trabajar de manera conjunta. Esto nos permite tener una propuesta cada vez más consolidada»

Crecimiento sostenido:

Según relató Pablo, en los inicios de la carrera había que salir en búsqueda de industrias, cámaras o municipios para generar vínculos de trabajo que posibilitaran más oportunidades de intercambio para la comunidad universitaria y hoy el proceso es más recíproco. «En este tipo de formación profesional es fundamental trazar relaciones con el sector profesional, al principio debíamos ir uno por uno y actualmente es el propio sector el que nos demanda vinculación», indicó el coordinador académico y además resaltó: «Esto ha sido posible gracias al compromiso y seriedad con el que han trabajado estudiantes, docentes y nodocentes durante estos 6 años. Las industrias ven los resultados obtenidos e instintivamente quieren sumarse y a su vez eso motiva a seguir trabajando en ese sentido, es una retroalimentación constante».

Inserción laboral:

El plan de estudios de la carrera ofrece una formación que le posibilita a los estudiantes proyectarse como profesionales en distintos ámbitos. «Hay graduados y graduadas que se han abocado al sector privado, otros que realizan asesorías o trabajan en industrias y una parte muy importante ha comenzado sus propios emprendimientos generando, a su vez, más puestos de trabajo», señaló Pablo y agregó: «También hay muchos que hicieron sus prácticas profesionales en empresas que después los convocaron para formar parte del plantel y eso nos llena de orgullo. Desde la Universidad trabajamos en su formación, trazamos vínculos para que puedan llevar a la práctica sus conocimientos y posteriormente estas prácticas se traducen en posibilidades de inserción laboral». Además, dijo que también hay un interés cada vez más creciente por parte de los estudiantes en la carrera docente. «Es muy satisfactorio ver cómo los estudiantes realizan su primera ayudantía en algún espacio curricular, lo vuelven a hacer año tras año y después se incorporan al equipo como Adscriptos», destacó.

 

Pandemia y Universidad: 

En principio, Ambrosino remarcó que es importante tener en cuenta que se trata de una carrera totalmente presencial, con un equipo docente formado para dictar clases en esa modalidad y con un plan de estudios que contempla una gran carga de actividades prácticas. A pesar de esto, resaltó la predisposición de toda la comunidad para adaptarse a las necesidades y el «permanente» acompañamiento por parte del Instituto. «Llegando a fin de año vemos resultados muy buenos sobre algo que pensamos que sería imposible. Si bien hay instancias prácticas que indefectiblemente han tenido que ser pospuestas, gran parte de los espacios curriculares han podido cerrar sus regularidades y más del 80 porciento tomará exámenes virtuales en el turno de diciembre», manifestó y recalcó: «Diseño es taller, es compartir, es trabajar, es comunicar y es presencial, pero tuvimos que resignificarnos. Esto fue posible gracias a que nuestros docentes y estudiantes hicieron todo lo que estaba a su alcance para continuar con el cursado, y al Instituto que concretó diversas instancias de formación y capacitación en torno a la virtualidad».

 

Proyecciones:

Para finalizar, el coordinador especificó que los ejes de las actividades para el 2021 se basarán en temáticas vinculadas a los alimentos, la sustentabilidad y la vinculación con la sociedad. «Nos hemos propuesto comenzar a trabajar de manera articulada con otras carreras que dicta el Instituto de Básicas para poder generar novedosas propuestas relacionadas al mundo alimenticio y lo sustentable, que es un eje trascendental en el mundo del diseño industrial contemporáneo. Además, queremos posicionar nuestro Laboratorio de Prototipado Rápido como un centro de investigación y servicio para la comunidad».

 

Perfil del Entrevistado:

Pablo Ambrosino nació en San Francisco, es diseñador industrial egresado de la Facultad de Arquitectura Urbanismo y Diseño de la Universidad Nacional de Córdoba (FAUD – UNC) y Especialista en Docencia Universitaria por la Universidad Tecnológica Nacional – Facultad Regional San Francisco (UTN – FRSF). Se desempeña como docente de los espacios curriculares Diseño Industrial 1 y Práctica Profesional. Coordina la carrera de la UNVM desde el año 2014, cuando se puso en marcha su primera cohorte.

La LAER fue incorporada a la oferta del Instituto Académico Pedagógico de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) en 2011 y comenzó a dictarse con 8 estudiantes en el primer año. A comienzos de 2020 la matrícula fue de 80 inscriptos. «Es muy notable el crecimiento que ha tenido la carrera estos últimos años. La temática ambiental y energética, por suerte, se ha vuelto central y eso se ha visto reflejado en la cantidad de personas que hoy eligen la LAER para estudiar», comentó al respecto la coordinadora, especialista Rosana Rossi.

«De todas las carreras vinculadas al ambiente y a las energías renovables que existen en el país, la nuestra es la única que ofrece esta formación en una Universidad pública. No se puede pensar el ambiente separado de las energías renovables y viceversa», precisó la coordinadora y manifestó que es uno de los factores que impulsa a la elección de esta propuesta por sobre otras.

Vinculación:

Según destacó Rosana, la propuesta académica se vincula «fuertemente» con la comunidad a través de proyectos de investigación y extensión relacionados a la salud ambiental, bioenergía, ordenamiento territorial, cambio climático, calidad de suelo y agua en relación a los riesgos ambientales, movilidad sustentable, eficiencia energética, entre otros. Además de generar espacios de debates sobre temas de actualidad.  «Este intercambio se hace posible gracias al aporte de docentes, estudiantes y egresados. Contamos con docentes formados en diferentes áreas disciplinares, con una comunidad estudiantil y egresados de participación muy activa, lo que se traduce en que  la carrera pueda consolidarse a través del diálogo con el entorno», destacó Rossi y a su vez resaltó que el compromiso que tienen los estudiantes «nos interpela y nos transforma como docentes y personas. Eso resulta muy enriquecedor»

Inserción laboral:

En tanto a la salida laboral la coordinadora académica de la licenciatura comentó que en 2019 se llevó a cabo un encuentro entre graduadas y graduados en donde se pudo constatar que la inserción en el campo profesional es muy variada. «Tenemos graduados y graduadas que trabajan como asesores ambientales en forma privada y en organismos públicos municipales, en otros casos, son parte de proyectos sobre energías renovables en empresas y en forma particular, un grupo continua su formación de posgrado, y otros comenzaron su carrera en la investigación y la docencia».

Según añadió Rosana, el sector público también se ha posicionado como un campo de acción para graduados y graduadas de la LAER: «Cada vez son más los municipios que requieren el asesoramiento de nuestros graduados a la hora de planificar políticas públicas, esta actividad se verá fortalecida gracias a la reciente incorporación de las carreras de ambiente al artículo 43 de la Ley de Educación Superior, a partir de la cual se   la reconoce como una actividad de interés público”

Pandemia y Universidad:

Con respecto a la virtualidad excepcional que ha desafiado a todo el sistema educativo, Rosana resaltó en primer lugar la predisposición de docentes y estudiantes para poder seguir dando curso al Calendario Académico pese al contexto. «La presencialidad es irremplazable pero nuestros docentes han demostrado un fuerte compromiso en la adecuación de las clases y las instancias evaluativas. En el primer turno de exámenes finales virtuales hubo aproximadamente un 40 porciento de espacios curriculares que adhirieron a la modalidad excepcional, hoy ya son alrededor del 80 porciento los que realizarán las evaluaciones en este formato», destacó Rossi y añadió «El porcentaje que queda por fuera son materias que, por su particularidad práctica, no pueden adecuarse a la modalidad de evaluación virtual, pero todos los espacios llevaron a cabo un trabajo sumamente valorable para que las regularidades se cerraran en la totalidad de las asignaturas»

Por último, la coordinadora resaltó el permanente acompañamiento de la Institución Universitaria ante esta eventualidad y específicamente al Instituto: «Las capacitaciones brindadas para adecuar los espacios a la plataforma  moodle, los encuentros semanales organizados por el grupo del Área de Promoción de la Calidad Educativa (APCE) para intercambiar experiencias entre docentes de las distintas carreras de Básicas y la posibilidad de contar con un sistema de tutorías en el uso del Campus Virtual, contribuyó a que, pese a las dificultades que conlleva esta situación, podamos adecuarnos al contexto y responder a las demandas»

Perfil de la entrevistada:

Rosana es Ingeniera Química por la Universidad Tecnológica Nacional, Facultad Regional Villa María (UTN-FRVM), realizó una especialización en Ingeniería Ambiental en la UTN – Facultad Regional Córdoba, se desempeña como docente de Química Ambiental y Física, y a poco más de un año de haber sido electa como coordinadora de la LAER manifiesta que «resultó un gran desafío que me sigue transformando en todo sentido y que ha sido posible gracias al permanente apoyo de la Comisión Asesora a la coordinación y de toda la comunidad de la carrera».

En el marco de la trigésimo tercera edición de la Colación de Grado de la UNVM, 68 profesionales del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas recibieron su diploma de forma virtual. 

La ceremonia comenzó pasadas las 19:30 de este miércoles 7 de octubre y fue transmitida vía streaming por el canal de YouTube de la Universidad Nacional de Villa María. El acto estuvo encabezado por el rector, Luis Negretti, la vicerrectora Elizabeth Theiler, el coordinador de gabinete, Germán Cassetta, la decana del Instituto, Carolina Morgante, el secretario Académico, Javier Díaz Araujo y la secretaria general, Paula Miozzo, quienes se encontraban en el auditorio del Campus para hacer entrega simbólica de los diplomas.

En tanto las graduadas y los graduados formaron parte del evento desde sus hogares a través de una teleconferencia por la plataforma Zoom. Se trató de una modalidad excepcional que responde al contexto de emergencia sanitaria por el Covid-19 y las restricciones vigentes para la realización de eventos masivos.

«Como casa de estudios universitarios, el fin último que perseguimos es el de formar a nuevos profesionales, es por eso que estamos hoy aquí adecuándonos a las circunstancias, con el objetivo de poder finalizar juntos este trayecto formativo» se refirió al respecto en su discurso la decana. Además resaltó: «Han sido meses difíciles en donde hemos sido desafiados a, eventualmente, adecuarnos a las nuevas demandas. Esto ha sido posible gracias a cada una de las personas que pusieron su granito de arena para continuar dando curso a nuestro calendario académico, posibilitando que hoy podamos encontrarnos en un nuevo acto de colación de la UNVM»

Por su parte al momento de brindar el discurso, el rector realizó un repaso por las distintas acciones que la Universidad ha venido llevando a cabo en pos de contrarrestar el avance del nuevo Coronavirus Covid-19. Al finalizar destacó el sentimiento de agradecimiento para con los graduados y graduadas «por haber elegido esta casa para transitar sus estudios de grado» e instó a los nuevos profesionales a seguir participando de la vida de la académica de la UNVM.

En tanto en representación de las graduadas y los graduados dirigió unas palabras a sus pares el médico veterinario Federico Bonetto expresando su gratitud para con toda la comunidad universitaria.

Además el evento contó con un saludo virtual del Ministro de Educación de la Nación Nicolás Trotta.

Resulta importante recordar que la primera Colación de Grado de la UNVM se desarrolló en 2003. Desde entonces, se graduaron más de 5000 estudiantes que eligieron transitar su formación profesional en las aulas de la Universidad Pública.

Mejor promedio:

El graduado de la licenciatura en Informática, Emiliano Jesús Marzioni, recibió una mención especial por haber obtenido el mejor promedio con 9,31. A su vez este logro fue premiado por el Banco Patagonia con 15mil pesos.

Graduados y graduadas de Básicas: 

Licenciatura en Ambiente y Energías Renovables:

Fissore, Paula
Pugliesi, Rocío Belén
Vedelago, Sofía Ayelén

Licenciatura en Informática

Andrés Vecino, Joel Maximiliano
Garaffini, Sergio Javier
Maestri, Santiago José
Marzioni, Emiliano Jesús
Oddino, César Adrián
Picca, Juan Manuel
Ribero, Italo Eduardo
Rinaudo, Matías Roberto

Licenciatura en Óptica Oftálmica

Zubiri, Judith Elizabeth

Agronomía

Bagües, Gastón Nicolás
Bertola, Luis Esteban
Bonanzoni, Guillermo
Brugnoni, Leonardo David
Caffaratto Filippi, Lucila Florencia
Capello, Martín Alberto
Cravero, Germán Gabriel
Crescimbeni,Marcos David
Guiñazú, Juan Augusto
Gilli, Paula
Karlau, Laura Andrea
Orlandoni, Nicolás Román
Pacheco Actis, Santiago
Rinero, Santiago Gaspar
Ríos, Malvina Soledad
Varas, Ariel Eduardo
Rodríguez, Franco Emiliano
Spilj, Joaquín Ariel
Tesio Rossi, Juan Ignacio
Tortone, Francisco Nahuel

Ingeniería en Alimentos

Aguirre, Alexis Nicolás
Arias, Roxana Cecilia
Bergara, José Luis
Bernardi, Mariela Rita
Bosco, Camila Janet
Butassi, Franco
Centomo, Antonella María
Faccia, Martín
Fonseca, Mónica Marcela
Gill, Tomás Ramón
Giorgis, Lucas Daniel
Gómez Coria, Franco Sebastián
Harispe, Ivana Andrea
Hidalgo, Germán Roberto
Leiva Bravo, Cristian Sebastián
Moreno, Natalia Alejandra
Noccelli, María Luz
Orlando, Nicolás Horacio
Peppino, Oriana Vanesa
Piva, Exequiel Matías
Pochettino, María del Huerto
Romero, María Belén
Vassallo, Emiliano Martín

Medicina Veterinaria

Álvarez, Emmanuel
Arraras, Guadalupe
Bonetto, Federico Oscar
Carrizo Celoira, Maitén Alejandra
Delgado, Silvina Raquel
Ezenga, Ariel
Franco, Cintia Noemí
Levis, Nicolás
Monge Pozzi, Lorena Soledad
Racca, María Victoria
Sánchez, Nicolás Ezequiel
Scarponi, Melina Belén

Las actividades organizadas por el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) se desarrollarán de manera virtual entre noviembre y diciembre y estarán destinadas a profesionales de las ciencias agropecuarias.

El curso apunta a una actualización profesional en el área forestal a través del dictado de 8 módulos con instancias teórico prácticas. Se trata de una iniciativa de trabajo conjunto entre el Instituto, el Colegio de Ingenieros Agrónomos de la Provincia de Córdoba y el Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación.

Aranceles:

  • Curso completo $3000
  • Módulos obligatorios $2000.- (incluye 2 módulos optativos a elección)

Becas limitadas para graduados y graduadas del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas

Interesados e interesadas deberán realizar la inscripción hasta el 13 de noviembre aquí

Datos para el pago:

Fundación de la Universidad Nacional de Villa María

Cuenta Corriente Banco Patagonia: 341-341634455-000

CBU: 0340341700341634455001

ALIAS: RUSIA.TIGRE.BANDA

Para finalizar el proceso deberá enviarse el comprobante de pago a mcelis@unvm.edu.ar

Cronograma completo

Más información: secretariaicba@gmail.com

 

Foto de acrhivo

Un equipo de investigación conformado por docentes, graduadas y estudiantes del Instituto de Ciencias Básicas y Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM), resultó beneficiario de una beca Nacional de Investigación llamada ‘’Salud Investiga’’ de 300 mil pesos.

El proyecto, denominado «Diagnóstico de la Calidad Ambiental y su relación con patologías cardio-respiratorias en el Boliche del Palo, departamento General San Martin», pertenece a la graduada de la licenciatura en Ambiente y Energías Renovables (LAER), Sofía Vedelago y es dirigido por la doctora Lara Buthet y el doctor Omar Rey.

Buthet es docente del Instituto de Básicas, doctora en Toxicología y especialista en salud ambiental. Comentó que desde hace unos años comenzaron a trabajar con un grupo de la comunidad argentino-boliviana, cuya actividad es la producción de ladrillos artesanales en un lugar ubicado fuera del ejido urbano, sobre ruta Nacional 9.

‘’Cuando llegamos empezamos analizar cuestiones ambientales. Sofía veía la zoonosis, la polución del aire, el análisis del monóxido de carbono, la contaminación del agua. En base a eso, decidimos continuar porque notamos que había muchas cosas para hacer. Y nos faltaba la parte de Medicina’’, resaltó. A raíz de esto, conformaron un equipo con docentes y estudiantes de la carrera de Medicina de la UNVM

 

El Proyecto

La investigación está conformada por Sofía Vedelago, quien lleva adelante el proyecto bajo la dirección de Buthet y Rey, y participan las estudiantes Agustina Aponte, Laura Alonso, Antolla Barrera y el estudiante Nicolás Rinaldi. Cuenta también con la colaboración de la docente de la LAER, Jimena Rodríguez.

‘’Vamos a estar midiendo la calidad ambiental y ellos van a hacer un chequeo realizando un estado cardiorrespiratorio, por la producción que ellos tienen. Porque viven donde trabajan. Si hay contaminación, la tienen las 24 horas del día. Los hornos de ladrillos están a metros de donde viven. Por eso es muy importante analizar. Y ver si hay material particulado y si se relaciona con alguna patología respiratoria de la comunidad’’, indicó la directora.

Por último la docente resaltó que es un trabajo conjunto. ‘’La comunidad con nosotros y nosotros con la comunidad’’, dijo.

Por su parte, Vedelago comentó que es la primera vez que gana una beca nacional. ‘’Es un antecedente muy grande, para seguir formándome como profesional y continuar con el estudio en la ladrillera. Si bien ya venimos trabajando y es un trabajo de años, está bueno que podamos continuarlo y podamos ayudar a la comunidad, y generar más resultados y conocimientos. Cada año vamos ampliando el rango de estudio. Es un trabajo en equipo. En cuanto a lo personal es un logro enorme y estoy muy contenta de haberlo conseguido’’.

(Fotos de acrhivo)

 

La tesis doctoral del Médico Veterinario, Alejando Macagno se enfoca en estudiar y experimentar diversos protocolos de inseminación artificial que permitan mejorar las tasas de preñez en vacas lecheras, a través de la creación de un medio ambiente uterino más favorable para el desarrollo del embrión.

 

La salud, el bienestar y la genética animal, son objetivos primordiales para los tambos. Este es el punto de unión que encuentra el sector académico con el productivo e industrial, donde a raíz de diversas demandas surgen respuestas y soluciones a las distintas problemáticas que día a día enfrenta el productor.

Una línea de investigación del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) busca comprobar la eficiencia de distintos protocolos de inseminación a tiempo fijo, en vacas y vaquillonas lecheras (Holando Argentino), para mejorar las tasas de preñez a través de la creación de un medio ambiente uterino más favorable para el desarrollo del embrión.

Según explicó el Médico Veterinario Alejandro Macagno, que lleva adelante esta investigación, en dichos protocolos se busca, a través de la administración de distintas hormonas en diferentes momentos, sincronizar a la vaca para ser inseminada en un momento específico y lograr obtener así un mayor porcentaje de éxito.

Se trata de una línea de investigación novedosa en lo que respecta a lechería y es dirigida por el doctor Gabriel Amílcar Bó, referente a nivel nacional, docente de la UNVM y director del Instituto de Reproducción Animal Córdoba (IRAC). También es codirigida por el doctor Alejo Menchaca, director del Instituto de Reproducción Animal de Montevideo, Uruguay.

Qué son los protocolos de inseminación artificial

El uso de protocolos de inseminación artificial en bovinos no ha parado de crecer en Argentina en los últimos 20 años. “Al principio esta tecnología solo era utilizada por los productores más innovadores y audaces, hoy ya es utilizada por aquellos más pragmáticos o conservadores. Este crecimiento en el uso responde a varios factores y uno es su gran eficacia”, comentó.

Explicó que los tratamientos para inseminación artificial a tiempo fijo -abreviado con la sigla IATF- logran con éxito inducir y sincronizar la ovulación, tanto en vaquillonas como en vacas.  “Es una tecnología de fácil aplicación en el campo y, si bien requiere un conocimiento profundo del profesional veterinario que la aplica, no implica un manejo complejo del rodeo y no requiere equipamiento de alto costo. Considerando el beneficio que genera, tampoco implica un gran costo para el productor, permitiendo una buena tasa de preñez”.

Resaltó que hace algunos años, desde el ámbito científico se puso especial énfasis en controlar la dinámica folicular y el momento de la ovulación, con tal éxito que hoy es difícil mejorar aún más este aspecto. Sin embargo, dijo que “evidentemente hay otros puntos a mejorar ya que aún hay un porcentaje considerable de vacas que no se preñan por distintas razones”.

Y agregó: “Originalmente el productor contrataba a una persona que detectaba el celo natural de la vaca y en ese momento se la inseminaba. Eso implicaba que debía estar todos los días a varias horas mirando las vacas para ver si estas presentaban algún signo de celo y así poder inseminarlas. Luego se crearon protocolos de IATF que agrupan los celos en ciertos periodos de tiempo. En vez de estar todos los días viendo qué animal entra en celo, estos se concentraban en cierta cantidad de días. La gran ventaja de estos tratamientos es que se sincroniza a los animales pudiéndolos inseminar en un mismo momento, donde no es necesario detectar celo”.

Recientemente se desarrollaron los protocolos de IATF de proestro prolongado. “Se define como el periodo comprendido entre la extracción del dispositivo con progesterona y la IATF, donde no se le administra un inductor de la ovulación al retiro del dispositivo, por lo tanto, las vacas entrarían en celo en un proceso más natural, no inducido por una hormona”.

El trabajo de tesis consiste en comparar dos protocolos de proestro prolongado denominados J- Synch de 6 días y J – Synch de 7 días en relación al protocolo tradicional, para evaluar cuál de las dos opciones es más efectiva para mejorar la tasa de preñez.

Objetivos

Según comentó, el objetivo principal es “evaluar el efecto de la utilización de los protocolos de prolongación de proestro J-Synch y sus respectivas modificaciones sobre la fertilidad en vacas en lactancia y vaquillonas lecheras”.

“La idea es determinar con mayor profundidad su efecto sobre la dinámica folicular, los distintos niveles de las hormonas en la sangre, características del folículo ovulatorio, ovocito y endometrio. Además, evaluar la utilización de este protocolo en programas de IATF en vacas de leche inseminadas a tiempo fijo”, resaltó.

Y agregó que lo que buscan saber es, si con la prolongación del proestro en vacas y vaquillonas usando protocolos J-Synch y J-Synch modificado, aumentará significativamente la respuesta ovárica, la fertilidad, el ambiente uterino y las tasas de preñez de los animales sincronizados en comparación con los protocolos tradicionales.

Experimentos

El trabajo cuenta con diferentes etapas de realización. Una primera instancia de búsqueda bibliográfica y de preparación de los que será la etapa experimental, en la cual se inseminarán vacas y vaquillonas lecheras y se evaluarán los efectos del protocolo en la dinámica folicular, momento ovulatorio, desarrollo luteal y concentración sérica de los principales esteroides sexuales. También se analizará la morfología y competencia ovocitaria, el desarrollo y calidad embrionaria y las tasas de preñez.

Perfil del Investigador

Alejandro tiene 28 años y es de Villa María. Se graduó de la carrera de Medicina Veterinaria de la UNVM con sede en Villa del Rosario en 2019. En su trayecto como estudiante participó de ayudantías y diversos proyectos de investigación. También fue beneficiario de una Beca de Estímulo a la Vocación Científica (EVC – CIN). Actualmente se encuentra cursando la Especialización. en Reproducción Bovina del Instituto de Reproducción Animal de Córdoba (IRAC). También realiza el doctorado en Ciencias con Mención en Agroalimentos de la UNVM,  en el marco de una beca doctoral de nivel inicial financiada por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT), en contexto del proyecto PICT-2017-4550.

 

En los laboratorios de la Universidad Nacional de Villa María se vienen desarrollando distintas líneas de trabajo que apuntan a resolver las demandas del sector productivo a nivel local y regional. Una de estas busca proponer un nuevo tratamiento para la infección que genera la mastitis bovina. «Estamos trabajando en alternativas terapéuticas a base de Vitamina D, que permitan disminuir el uso de antibióticos y potenciar el sistema inmune de la vaca», comentó la médica veterinaria Georgina Tiraboschi.

Según señaló la graduada del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM, la mastitis bovina representa hoy una de los principales motivos de pérdida económica para el sector lácteo y es causada fundamentalmente por la Staphylococcus coagulasa negativo y la Staphylococcus aureus. «Se trata de dos bacterias que, además de enfermar a la vaca, son capaces de generar biofilms que funcionan como escudo, dificultando así la correcta absorción de la terapia antibiótica suministrada», destacó la médica veterinaria.

«Actualmente estamos trabajando en una alternativa a base de Vitamina D utilizada como agente inmuno modulador, estimulando la generación de péptidos microbianos», resaltó Georgina, y agregó: «Los péptidos nos permitirían contrarrestar la conformación de esos escudos que generan las bacterias, potenciando el tratamiento antibiótico y a su vez al sistema inmune del animal».

El equipo, conformado por investigadoras, docentes, becarias y estudiantes de Básicas, viene avanzando desde hace algunos años para dar respuesta a esta necesidad propia del sector productivo lácteo. «En una primera instancia la línea se abocó al desarrollo de formulaciones a base de quitosano, posteriormente se generaron nanoparticulas cargadas de este polímero y en esta nueva etapa pretendemos incorporar la Vitamina D a este compuesto, para sumar ambos efectos buscando un mejor tratamiento contra la infección de la ubre de la vaca», destacó la investigadora.

La relevancia de este avance radica en la posibilidad de evitar las pérdidas económicas que se producen cuando una vaca se enferma de mastitis. Según mencionaron, el tratamiento que se utiliza actualmente implica retirar al animal de la producción mientras se lo esté atendiendo y a su vez, cuando la vaca ya esté curada, no podrá volver a producir comercialmente en el mediano plazo a causa de los restos de antibióticos que se alojarán en su organismo. «Esta alternativa representa una oportunidad para fortalecer el sistema inmune del animal evitando que se infecte con la bacteria y, en el caso de que se infecte, potenciar el efecto de los antibióticos suministrados garantizando una pronta reincorporación a la producción», concluyó Tiraboschi.

Perfil de la investigadora:

Georgina tiene 29 años es oriunda de Villa Carlos Paz, estudió Medicina Veterinaria en la sede de Villa del Rosario de la UNVM, se graduó en 2019 y a principios de 2020 se incorporó al doctorado en Ciencias con Mención Agroalimentos y fue beneficiada con una beca doctoral del Conicet, dirigida y co dirigida por las doctoras Luciana Bohl y Carina Porporatto respectivamente.

Un grupo de investigación del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM, trabajará en desarrollar ingredientes funcionales. De la iniciativa participan docentes e investigadoras de Villa María y la Universidad Nacional del Litoral, Santa Fe.

La graduada en Ingeniería en Alimentos, Antonella Centomo lleva adelante un trabajo de investigación que tiene como objetivo desarrollar ingredientes funcionales para alimentos.

“Existe un mayor conocimiento entre la relación dieta-salud por parte de los consumidores y eso ocasiona una creciente demanda de alimentos y en particular alimentos ‘funcionales’ que son aquellos que además de cumplir con el rol básico de la nutrición otorgan un beneficio adicional sobre la salud del consumidor o pueden ejercer una acción preventiva contra algunas patologías’’, explicó.

Y agregó que, para la elaboración de esos alimentos, surge la necesidad de ‘’diseñar y producir ingredientes funcionales a partir de agentes bioactivos, con actividad biológica científicamente demostrada in vitro e in vivo. La idea es lograr que puedan ser eficientemente incorporados a diferentes matrices alimentarias, y estén biodisponibles sin pérdida de funcionalidad biológica durante el procesamiento, almacenamiento y pasaje por el tracto gastrointestinal’’. Según aclaró la ingeniera los agentes bioactivos serán obtenidos a partir de co-productos agroalimentarios, como lo son en este caso el lactosuero y el tegumento de maní.

Etapas de trabajo

A raíz de la pandemia de Coronavirus, Centomo se encuentra en una etapa de investigación, lectura y realización de cursos de posgrado en su área de investigación, sin poder avanzar concretamente aún en las actividades experimentales.

Una vez en los laboratorios, el trabajo se dividirá de la siguiente manera. Una primera etapa de encapsulación. ‘’Consiste en microencapsular antioxidantes y microorganismos probióticos’’, detalló.

Y amplió: ‘’Los antioxidantes son extractos polifenólicos de tegumento de maní y fracciones peptídicas obtenidas de lactosuero y los microorganismos probióticos son levaduras y bacterias ácido lácticas aisladas de lactosuero. Y además formular co-encapsulados entre los antioxidantes y los probióticos’’.

Luego, en una segunda y tercera instancia buscará comprobar que los ingredientes desarrollados realmente son bio-funcionales. ‘’Para ello hay que demostrar su efecto benéfico in vitro e in vivo’’, dijo.

A su vez explicó que la segunda etapa consistirá en el estudio de las bioactividades, permitiendo comprobar el efecto benéfico de los encapsulados in vitro, mediante el cultivo celular en  una ‘’línea celular de epitelio intestinal murino IEC-18)’’.

En tanto que, según comentó, la tercera etapa se realizará in vivo, en un modelo animal murino, para dar cuenta del efecto beneficioso y preventivo de probióticos y antioxidantes contra infecciones entéricas. Estos ensayos serán realizados en colaboración con el doctor Gabriel Vinderola (INLAIN-UNL) un prestigioso investigador reconocido a nivel nacional e internacional.

Perfil de la investigadora

Antonella es de Villa María y tiene 24 años. Es Ingeniera en Alimentos, graduada en diciembre del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas. Fue beneficiaria de una beca CIN en el período 2019-2020 y actualmente cuenta con una Beca Interna en el Centro de Investigación y Transferencia (CIT) CONICET. Dicha beca está dirigida por la doctora Mariana Montenegro (CIT VM – UNVM) y co-dirigida por Gabriel Vinderola (INLAIN, UNL). También lleva adelante su doctorado en la UNVM en Ciencias Mención Agroalimentos, bajo la directo de las doctoras Yanina Rossi y Mariana Montenegro.

El trabajo de tesis doctoral de la Ing. Centomo se enmarca en la línea de investigación “Desarrollo, caracterización y aplicación de ingredientes bioactivos obtenidos de co-productos agroindustriales para la formulación de lácteos funcionales”, dirigida por la doctora Montenegro, y de la cual forman parte docentes, investigadores, becarios posdoctorales y doctorales CONICET, egresados y estudiantes del Instituto.